Esencialmente, el concepto comercial de análisis cuantitativo implica el proceso de aplicar una técnica comercial o financiera que busca comprender el comportamiento dentro del mercado de divisas mediante la aplicación de un sistema complejo de modelado matemático y estadístico, junto con la medición de los valores de mercado y la investigación.
Generalmente esto se hace posible mediante el método de aplicar una serie de valores numéricos a determinadas variables, con los que los analistas cuantitativos intentan replicar matemáticamente la realidad y así predecir cambios y movimientos con los mercados.
Hay muchas razones para emplear un quant (como se conoce cariñosamente a los analistas cuantitativos), ya que el análisis cuantitativo en sí mismo se puede llevar a cabo por varias razones, como una evaluación del desempeño, medición o valoración de un determinado instrumento financiero. Por ejemplo, en términos de divisas para un patrón o estilo comercial determinado, mientras que también se puede usar para predecir con bastante precisión ciertos eventos del mundo real, como cambios en el precio de las acciones y puntos de inflexión en la inflación.
Sin embargo, en términos más amplios, el análisis cuantitativo es más simplemente una forma de medir e interpretar ciertas cosas y eventos, y puede usarse para tareas de ritmo más común, como calcular índices financieros simples, como las ganancias por acción, o por razones más complicadas, como calcular el precio de la opción o el flujo de caja descontado.
Si bien no hay duda de que, aunque el análisis cuantitativo es una herramienta poderosa para evaluar el potencial de inversión, en realidad es solo un lado de la historia y su contraparte, el análisis cualitativo también debe utilizarse para obtener una imagen completa.